Hola! ¿Me echabais de menos? Causas ajenas a mi voluntad o, lo que es lo
mismo, el puñetero trabajo, me han tenido apartado del blog más de lo que yo
hubiese querido, justo en una semana en la que había mucho que celebrar. Una de
esas celebraciones era la correspondiente a mi cumpleaños y desde aquí quiero
agradecer a los que os habéis tomado un momentito para escribir unas líneas
felicitándome. Gracias a todos! Decir que os llevo en el corazón sería algo
rimbombante, pero que os estoy cogiendo una especie de extraño afecto en la
distancia es un hecho. Pero mi cumpleaños fue el lunes y hoy es viernes, así
que vayamos ya a lo que corresponde.
No sé hasta qué punto sois supersticiosos o creéis en las ciencias
esotéricas. En cualquiera de los casos, puede que esta novela os interese, pues
os hará reflexionar sea cual sea vuestro punto de vista. El título que hoy os
presento es “Las Hojas de Julia” de la autora María Jeunet.
Se trata de una novela que podríamos incluir en el género romántico, pero
tengo que decir que no es la típica historia de amor. Hay varios elementos que
la diferencian, tales como la futurología, la brujería y el poder de las
supersticiones.
Y es tras esta cortina de magia donde se esconden las
auténticas reflexiones de la novela. ¿Son realmente libres nuestras decisiones?
¿Qué las condiciona? ¿Puede manejarse el amor con la frialdad de la cabeza o es
el corazón el que finalmente consigue que nos dejemos llevar? ¿Está decidido de
antemano nuestro futuro o podemos moldearlo a nuestro gusto?
Julia Olsen es una joven a la que las cosas le van bien. Está a punto de
cumplir treinta años y todo a su alrededor, familia, trabajo, amistades, parece
funcionar del mejor modo posible. Pero algo se esconde tras esta imagen de
aparente éxito y es que la vida de Julia está dominada por las dudas, por el
temor y por la fantasía que alguien introdujo en su cabeza cuando todavía era
una niña. Por mucho que los años pasen, Julia tiene siempre presente las
palabras que una pitonisa le dijo en una feria cuando tenía trece años, una
profecía sobre el hombre de su vida. En cuanto le vea sabrá que tiene que estar
con él y podrá reconocerle por la marca que presenta en su rostro, algo que le
hace único.
Con una premisa como esta Julia pasa por la vida manteniendo relaciones sentimentales
condenadas al fracaso incluso antes de comenzar. No importa lo mucho que pueda
gustarle un chico, ninguno tiene marca alguna en el rostro.
Y entonces aparece Will, su nuevo compañero en la oficina. Desde ese
momento la vida de Julia será un torbellino de dudas y temores. Will la hace
sentir como nunca nadie lo había hecho antes, es encantador, detallista y un
maromo de los que hacen que todas las féminas acaben teniendo dolor de cuello
de tanto girarlo para observarle. Will es perfecto excepto por un pequeño
detalle. En su cara no hay rastro de marca alguna.
Para terminar de empeorarlo todo, entra en escena James. Algo surge entre
ellos, aunque en absoluto tan fuerte como lo que sucede con Will. La decisión
parece clara pero, ¿obviará Julia la señal en el rostro de James tras tantos
años de búsqueda?
Como he dicho antes, no estamos ante la típica historia de amor. Por lo
pronto, no se da aquí el acostumbrado hecho de chica conoce chico, se enamoran
y luchan contra las adversidades hasta acabar juntos. Aquí es la propia Julia
la adversidad, es ella la que, cada vez que siente algo por un chicho lo aleja
de su vida esperando que aparezca el supuesto hombre de su vida con la marca en
el rostro. Esto hace que, en ciertos momentos, el lector quiero atravesar las
páginas del libro para llegar hasta Julia y estrangularla por necia. Al menos,
así me ha pasado a mí. En absoluto esto es nada malo, es la prueba más
fehaciente de lo mucho que uno llega a introducirse en la historia.
El estilo de María Jeunet es
sencillo, claro y directo con diálogos frescos que consiguen mantenerte pegado
a las páginas del libro o a la pantalla del lector, según el caso, algo a lo
que también ayudan los personajes.
Julia, ya lo he comentado, está un tanto
descentrada, pero terminas cogiéndole cariño. En cuanto a Will, ¿qué decir de
él? Tiene una forma de actuar que para mi quisiera yo. Vamos, que siendo como
es él está claro que uno jamás envejecerá solo. Cindy, la mejor amiga de Julia
o Nora, su hermana, también ponen su punto de sal y pimienta a la historia. En
concreto, Nora tiene sus propios asuntos que atender, asuntos que al final de
la novela quedan sin resolver, pero que se adivinan como la trama central de la
siguiente novela de la autora, una historia que, a juzgar por lo que se puede
leer en “Las Hojas de Julia” está plagada de misterios.
En definitiva, “Las Hojas de Julia” es una historia llena de imprevistos,
coincidencias, amor, superstición, contradicciones sentimentales y con un tramo
final que me ha parecido maravilloso. Si alguien hace algo así por mí, juro que
me derrito en el sitio.
TÍTULO: Las Hojas de Julia
AUTOR: María Jeunet
PÁGINAS: 270
FORMATO: Ebook/Papel
PRECIO: 1.00€/7.59€
Enlaces para hacerse con la novela:
A mi no me va mucho la novela romántica pero este título parece que tiene algo distinto, por lo que dices. Investigaré un poco más.
ResponderEliminarNo es de mis estilos favoritos tampoco y, sin embargo, me ha gustado y mucho. Haz la prueba, tal vez a ti te ocurra lo mismo.
EliminarUn saludo.
Como a Morneo, debo reconocer que no me gustan las novelas de este estilo. Pero tu reseña (impecable, por otro lado) hace que dude... Veremos.
ResponderEliminar¡Saludos!
Ya te digo, a mi me tuvo todo el rato comiéndome la cabeza con la decisión que la protagonista acabaría tomando. Porque hay momentos en los que parece muy clara, pero luego todo se tuerce y vuelves a dudar y el asunto de la profecía le da su punto a toda la historia.
EliminarUn abrazo, Juan!
En verdad que me ha llamado mucho la atención por la síntesis y es un libro prometedor una buena historia, las supersticiones me llaman mucho la atención y mezcla con amor
ResponderEliminarPues si te ha llamado la atención, no lo dudes, es tu libro. Creo que tiene todos los ingredientes para que lo disfrutes.
EliminarUn saludo, Isabella.